¡Por fin nos llegó el capítulo 6 de Kageki Shojo! Donde después de que Ayako encuentra que su voz es simplemente hermosa, y que debe de tener más confianza en ella misma es que logra empezar de nuevo.
Ahora en este capítulo vemos que las chicas de primer año quieren elevar la dificultad de las cosas, pidiendo actuar, a pesar de que las de primer año sólo se limitan a observar y aprender de manera metódica, pero ellas se sienten simplemente entusiasmadas con intentar algo más arriesgado, así que logran que el consejo de maestros les den una oportunidad para que así ellas vean si son dignas de comenzar a actuar, o solamente se tienen que conformar con el plan de estudios que lleva sin cambiar desde hace un siglo.
Como meta en ser reconocidas, la clase va a interpretar por grupos una escena de Romeo y Julieta. A nuestras protagonistas les toca estar en el mismo grupo, ya que es su destino que ellas estén juntas, ok tal vez no, pero sería lindo.
Generando una escena graciosa entre Ai, que pareciera celosa del "novio" de Sarasa, pero seamos sinceros, no son celos románticos, simplemente no puede creer que la Sarasa que ella considera como torpe pueda tener un novio, y se siente un poco insegura e incómoda, ya que Sarasa es su primera amiga, y quiere asegurarse de poder darle un regalo que le guste más a Sarasa que ese ramo de flores. Ok, aquí sí que podemos tener un poco de esperanzas.
Al otro día, en clases, las chicas se sortean los personajes, quedando con Ai con el personaje principal, y pese a que ella quería que Romeo fuera Sarasa, no fue así. Y no, no son por sentimientos románticos, es sólo que Ai piensa que las líneas que había representado la otra vez Sarasa de Romeo (capítulo 5) fueron simplemente espectaculares.
Ya elegidos sus papeles, intentan dar ensayo breve, y es cuando se desilusionan con la pobre actuación de Sarasa, pasando inmediatamente con Ai, quién por alguna razón se veía incómoda.
Este capítulo nos es introductorio para que nuestras protagonistas, que en esta ocasión son cuatro, se enfrenten a la realidad del teatro, les va ayudar a darse cuenta en qué nivel están, y que el teatro no debe ser tomado para nada a la ligera. Que aunque sean adolescentes no es pretexto para no dar lo mejor de ellas, y que incluso las cargas pueden llegar a ser sofocantes, y tienen que demostrar que pueden con ello, si no, simplemente no sirven para Kouka.
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